Soy feliz por haber sido invitada a este retiro; tan necesario en mi, ya que fue mi primera experiencia; me dejó lo mejor, aprendí a entregarme con todo mi corazón, vivir una paz tan profunda que me movilizó. Quisiera decir tantas cosas lindas que no me puedo expresar. Agradecer a Gloria, Maggie e Isabel, que fue la que me invitó. Gracias, muchas Gracias a Dios por haber estado en ese lugar tan lleno de paz y a esas monjitas tan solidarias, que Dios las bendiga.
Elsa Mangioni (Negrita)
Para encender la llamita del amor….en nuestras familias, en nuestras comunidades. Y si! Sentí que me hacía falta. Llegué con llamita de piloto…¡Que bueno!! Tener ese tiempo para mirar hacia adentro, mirar cómo están las cosas conmigo, con Dios y con los demás.
¡Jamás! Dejaré de sorprenderme, cuantas cosas hay para seguir mirando, aprendiendo. ¡Fue maravilloso!! Hay un momento más fuerte, el más profundo, revisar nuestra historia y sacar, poder sacar aquello que dolió, que hirió, llorar, que lloren conmigo, llorar con “el otro”: mi hermano del corazón. ESO!! Es ser compasivo. Después, aquellos momentos de ALEGRIA como la del encuentro con los que conocía, los que no conocía y aquellas compañeras de secundaria que el Señor quiso que compartiéramos aquellos dos días! ¡QUE GOZO!! Sentí que el CAMINO nos une y que no tiene fin, porque el camino tiene una misma meta: LA ETERNIDAD. ¡Qué unidad de corazones!! Ese fuego del sábado por la noche: poder “quemar” todo lo que no quiero, para mi vida, quemar aquello que impide ser feliz. Saber que el Señor toma todo aquello que el fuego devora para que podamos “abrirnos” a la VIDA. Abrirnos para DAR, para ser canal para otros y ayudar a salir de las tinieblas. El retiro fue eso: COMPARTIR penas, alegrías, esperanzas, dolor….y para seguir mirando, aprendiendo.
¡GRACIAS SEÑOR!! Gracias instrumentazos de Dios: Gloria y Maggie ¡Gracias!! Asistentes de lujo: Isabel y Marisa.
Lili Gentile de Moro
¡Gracias señor!..por este “retiro de fuego” diferente, buenísimo para las nuevas, que eran muchas, y para las “viejas”que nos llevó a seguir profundizando en nuestro camino al corazón. ¡Gracias a Gloria, a Maggie, a Isabel, a Marisa que compartieron con amor lo que el Señor les fue entregando en sus trayectorias en el SEA y que hizo que este encuentro haya sido muy fuerte con nosostros mismos, con nuestros hermanos y con el señor: que nos ama tanto!..
Cora Bocatti de Orbea
No es muy fácil transmitir vivencias y sentimientos, por lo menos para mi. No es mi primer Retiro. Si es el primero tan personal. En un primer momento fue entrar en interior mirarme hacia adentro, con todo lo que implica, llegar a reconocer que viví usando máscaras, con tal de no reconocer mi debilidad, y todo lo que me provocó dolor, no quiero caer en lo mismo, usando palabras despersonalizadas me da la sensación que vuelvo a ponerme la careta. (…) Ahí está el Señor, que me dice que cuando entro en Mi, el está. Que no busque excusas, ni siquiera que tengo que dar catecismo, o hacer el curso de formación, si por eso me privo de un encuentro personal con El.
Esa primera noche no se si llegué a dormir dos horas. No se si llamar excitación, o buscarme tanto hacia adentro, por supuesto al terminar el retiro estaba cansada, pero con un montón de ideas y de ganas de buscar momentos de soledad, de encontrarme con mi alma, que allí me esperaba Dios. Y allí me queda reflotando una pregunta: ¿Cómo puedo crecer en mi manera de comunicarme? Todavía no tengo la respuesta.
Susana Alicia Raventos