Desde la filial Cordoba, felicitamos al P. Marcelo Renardi por sus 3 años de Sacerdocio, y compartimos su reflexión:
«Una vocación que no se agradece es una vocación que se marchita». Por eso, al cumplirse hoy el tercer aniversario de mi ordenación sacerdotal, te doy gracias Señor por estos años, por las comunidades a las que me enviaste, por todas las personas que has puesto en mi camino y que me compartieron sus historias de vida, sus alegrías, sus esperanzas, sus tristezas, sus dolores; y que con su cariño y compañía, me mostraron que siempre estabas a mi lado, alentándome y sosteniéndome en la misión de ser Vos en medio de esta Iglesia de Córdoba y en esta porción de la historia en la que vivo.
Gracias por todas las personas que rezaron, rezan y rezarán por mi para no desfallecer en esta hermosa y a la vez desafiante tarea de anunciar tu Reino, de hacerlo presente y concreto.
Y te pido perdón, Señor Jesús, porque, también en estos tres años de ministerio, no siempre he sabido ser reflejo tuyo, siendo manso, paciente y humilde como Vos. Sólo sé que recién estoy empezando a aprender a ser pastor, sin dejar nunca de ser oveja; y que Vos, mi buen Maestro, me acompañás, me guías y me enseñás a través de las mediaciones cotidianas que me regalás.
Y por último, te pido Señor, que siempre pueda ser un testigo alegre, entusiasta y apasionado de tu evangelio para poder animar a otros jóvenes a seguirte como discípulos, a través de esta hermosa vocación sacerdotal, que me hace pleno y feliz, que no me ha quitado nada, sino que, por pura Gracia, me va dando todo de a poquito. Gracias, mi Señor, mi Dios y mi Todo. Amen!
P. Marcelo