Mensaje del Papa Francisco por los 50 años del CESM

Santa Marta, 30 de enero de 2022

Señora Inés Ordoñez de Lanús

Querida Inés,

aquí está tu correo del pasado 18 esperando respuesta. Me disculpo por el atraso debido al aluvión de correspondencia propio de inicio del año. Me alegra la celebración de los 50 años, y me alegra que te acompañe Casaretto, hombre fiel y de sabiduría.

Me alegra la celebración de los 50 años del Centro de Espiritualidad. Hay que agradecer al Señor por este don. Me pedís que te escriba algo sobre el Centro. Quisiera complacerte en esto, y aquí escribo lo que me vaya saliendo.

El camino de un centro de Espiritualidad no debe ser otro que el camino del Evangelio. Sencillo, claro, cotidiano, tras los pasos de Jesús… y aceptando también hacer el camino de “comprender” el Evangelio (que no es lo mismo que “entender”). En el seguimiento de Jesús se simultánean luces y sombras, claridad y oscuridad, gozo y pena… Y para “andar bien” en este “simultáneamiento”, es necesario el diálogo continuo con el Espíritu Santo, luz y amor, creador de las diferencias y, a la vez, creador de la armonía. “Él es la armonía”. El Espíritu Santo es “el alma” de un Centro de Espiritualidad.

Y otra cosa que me viene es “el estilo”. Cuanto más cercano al “estilo de Jesús” será más auténtico. Y el estilo de Jesús era un estilo sencillo, concreto, con el ritmo y “la música” con que se expresaba su pueblo. Concreto y fiel a las raíces recibidas: la de la revelación y la de la cultura. Y, en este sentido, podemos hablar de la “originalidad” de Jesús. No pactó ni entró en el juego de las ideologías de su tiempo: fariseos, saduceos, esenios y zelotes. Se distinguió claramente de ellos y optó por su originalidad.

Y un Centro de espiritualidad debe optar por la originalidad del evangelio. Seguramente será “tentado” por alguna u otra ideología. En su camino de madurez deberá vencer esas tentaciones y “resituarse“ siempre en la originalidad del evangelio. Acordate por ejemplo, el mal que hizo la ideologización de tinte marxista de algunos centros latinoamericanos por los años 70.

Desde este centro, de este núcleo, debe nacer todo y organizarse todo. El camino de seguimiento a Jesús; la armonía es obra del Espíritu al cual debemos estar abiertos, un “método” necesario es la capacidad de discernimiento en el camino. Y esta capacidad es la que marcará el ritmo y asegurará el justo camino.

Inés, esto es lo que me salió del corazón. Me causa gracia tu sentido del humor, pensar en tus 75… “No te olvides de tu madre y de tu abuela” decía Pablo a Timoteo. Teniendo delante la figura de tu mamá (a quien recuerdo muy bien) podés prometerte una “juventud madura” de más años.

Te pido, por favor, que reces por mí. Lo hago por vos.

Que Jesús te bendiga y la Virgen Santa, te cuide.

Afectuosamente, Francisco