Celebramos la Fiesta del SEA y juntos honramos el Camino que hemos recorrido a lo largo de estos 30 años, desde que el Señor nos entregó el SEA, el 14 de septiembre de 1988.
¡Un verdadero gozo poder hacer una memoria agradecida de lo que este bendito carisma fue haciendo en nuestras vidas! ¡Gracias Señor, por este tesoro del SEA! ¡Gracias Inés por tu docilidad para recibir lo que el Señor te confiaba y por tu confianza y generosidad al entregarlo!
Y agradecemos especialmente a quienes nos acompañaron ayer, a quienes no pudieron acercarse pero lo hicieron desde sus casas, a Mons. Giorgi y a los sacerdotes que concelebraron, y a todo el equipo que colaboró en la organización.