Por Santiago Delfino
Llegar, preparar los lugares en la capilla, poner los banquitos, los almohadones, también sillas… contamos (sobraba una, la ponemos a un lado..). Preparamos la mesita, con su mantel, las velas, sabiendo que una vez todos reunidos, la pondremos en el centro, y hasta allí traeremos el Sagrario, al Señor. Prenderemos las velas, traeremos el libro de la Palabra, abriremos en las lecturas del día, y a los pies de Jesús, pondremos a María, su madre, la madre del SEA.
Revisamos si falta algo, todo ya está preparado, no hay nada mas que hacer, de ahora en adelante es todo de El.
Pedimos que rezaran, no por desconfianza o temor, pedimos que rezaran para ser muchos, para estar unidos, para ser comunidad que se abre a los que buscan, a los que quieren encontrar, pedimos que recen para que se abran los corazones, para que aprendamos a mirarnos, a escucharnos, a estar y permanecer fieles. Pedimos que rezaran para que en la oración en el banquito, el silencio se haga camino, el respirar se haga vuelta a casa, y el corazón corral de Cristo.
Y así fue.
Íbamos con lo puesto, la Palabra, la cruz, y la disposición, nada. Fueron llegando de distintos lugares, algunos sabían de que se trataba, otros no, algunos con algún retiro encima, para otros era el primero, algunos entre ellos amigos, otros apenas vistos alguna vez. Y Dios.
Todos fuimos comunidad, la silla que sobraba, a la mañana siguiente se hizo parte de la ronda alrededor de Cristo, uno mas había llegado, no estaba en los de la lista y así fuimos TODOS. Fuimos unos de los otros, gesto de Dios, que nos buscó, nos escuchó, nos encontró, nos trajo en sus hombros, nos trató con ternura, y supimos que éramos de su corral, del corral de Cristo, el pastor de ovejas.
Gracias por estar con nosotros en estos tres días. Tucumanos son lo más! Han formado una comunidad del SEA llena de vida, alegre, compartida, ávida de más y más, quieren todo del Señor, sus mujeres son de las que van adelante llevando la buena nueva. Nos encantó estar con ustedes, en el retiro y en sus casas. Como decía una de las lecturas del viernes “Un amigo fiel es un refugio seguro; el que lo halla ha encontrado un tesoro”. ¡Nos volvimos ricos!
Realmente me produce mucha alegría poder compartir con la comunidad del SEA este regalo que nos hace el Señor cada vez que le decimos que SI. Ya el año pasado fuimos con Santi y Carlos Beron al retiro de varones.
El llegar al lugar fue empezar a revivir el anterior, las caras conocidas y las nuevas que se iban sumando, la alegría de preparar la “tienda del encuentro” donde íbamos a compartir los próximos 3 días.
Convencidos de que el Señor se iba a ocupar de todo y que nosotros seríamos instrumentos, así fue! Tomó nuestro SEA. Y la verdad hizo maravillas, nos regaló unas lecturas impresionantes que eran “respuesta viva”, podíamos ver cómo los rostros se transfiguraban.
No tuvimos un instante donde no se sintiera la Presencia.
Un grupo maravilloso, por su disposición, hasta hubo uno de ellos que vino por un acompañamiento y se quedó a hacer el retiro. Las compartidas un tesoro para los corazones. Y algo muy lindo que nos sucedió que no estaba programado fue la demora de último momento de nuestro vuelo de más de 5 hs.. Ellos hicieron que el retiro durara más tiempo, para acompañarnos pero lo más fuerte es que seguimos en el retiro compartiendo la experiencia del AMOR , la HONRA, LA RECONCILIACION con una espontaneidad que conmovía.
Después fuimos recibidos en la casa de uno de ellos se sumaron otros y estoy seguro que hubieran querido estar todos, era sentir el Amor de un amigo, el tesoro que significa. Justo una de las lecturas del Viernes 24, con la que comenzamos el retiro.
Es imposible poner en palabras, todo lo que vivió y vive mi corazón, siento que el Señor me regalo poder hacer también el retiro por la gran paz que sentí y que siento. La palabra que sintetiza todo es GRACIAS!!!!!! Que en todos SEA!!!!!!
Carlos Udaquiola
Muchas gracias !!! En estos días encontré la «fuente» que tenía perdida hace un tiempo en medio de todos los desordenes de mi «corazón», la encontré y estoy feliz!!!
Permanecer…… esa palabra que repito varias veces al día.
Les mando un abrazo muy grande.
Santiago
Amigos del Corazón…Es realmente emotivo haber vivido esta experiencia del retiro con cada uno de ustedes. Fue una etapa muy importante para el camino que tenemos que recorrer cada uno por esta autopista que termina en la casa del Señor.
Seguramente dentro de un tiempo alguno o algunos, acelerados por el vértigo de cada día no podremos recordar lo intenso que fue este encuentro con Dios y con estos amigos. Así que los invito a que nos comprometamos cada uno consigo mismo y con el grupo a que nos llamemos y nos invitemos de nuevo las veces que sea necesario al retiro que haremos en el 2014.
besos y abrazos a todos
Martin